México

11 06 2011

Si hoy, y aunque tarde, escribo sobre México, es porque algunos sitios, costumbres, comidas y amantes del vino me han impactado.

Lejos de la imagen de México que tenemos en Europa por los muertos debidos al narcotráfico, he descubierto un país rico de tradiciones, de productos increibles, de paisajes y arquitecturas excepcionales, además de amantes del vino que me acogieron con calidez, a pesar de los problemas politico-diplomaticos entre mi país, Francia, y el suyo.

Para ir directo a lo bueno o buenísimo, empezar por hablar de la ciudad de Puebla, también conocida como Puebla de los Ángeles.
Ciudad histórica colonial con un legado cultural y arquitectónico único. He vistado unos cuantos paises y ciudades en mi vida y no creo que cualquier ciudad me impacte facilmente. Puebla es una ventana sobre el presente y el pasado de México. Una tierra donde se encontraron civilaciones mexicanas y europeas. Por supuesto hubo momentos de gloria y de pena inmensa… Lo cierto es que lo queda hoy en pie es único: palacios de inluencia española, francesa, italiana e indígena.

El Barrio antiguo es inmenso y no me canso de pasear y descubrir y redescubrir palacios, museos, iglesias, mercados, tiendas…
Y mejor que recomendar algo en particular, os invito a perderos en este centro histórico. ¡Todo un descubrimiento!.
Ahora sí, mi placer absoluto es comerme una «semita» bajo los arcos de la plaza mayor y luego ir a comer un plato de frutas tropicales deliciosas y enorme por dos o tres euros, les costará acabarlo.

Otro sitio extraordinario, Cholula. Bonita ciudad, la de las 365 iglesias (y no verifiqué, aunque creo sí es cierto) a diez minutos de Puebla. Una iglesia colonial, con colores tipo andaluz (blanco y albero) está en la cima de una colina que no es más que unas pirámides enormes que mandaron tapar, los conquistadores españoles, a una tribu indígena entera. Una vez acabado el trabajo titanesco, colocaron una iglesia en la cima. Y detrás de esta preciosidad, el tremendo y bonito volcán de Popocatepetl, de más de 5000 metros.
Hay una iglesia a cinco minutos de este sitio Santa María de Tonantzintla, obra maestra del Barroco Indígena, una capilla sixtina, para cortar el soplo…No tengo palabras.

También probé algunos restaurantes de interés:

En Puebla, en un entorno cuidadito y tranquilo, comida mexicana moderna con especialidades de la ciudad, incluyendo un delicioso «Molde de Puebla», delicioso, pero mejor llegar con hambre… El restaurante se llama La Noria, ubicado en 41 Poniente 2120-18 Colonia La Noria, CP 72410.
Aquí probé un plato típico de temporada, que parecen trigo tierno pero que en realidad son huevos de un tipo especial de hormigas. Delicioso.

Ya os comenté sobre la buena semita, en el Nuevo Mercado, a cinco minutos del centro de Puebla.

En Xalapa, Estado de Veracruz: Vinissimo Musée du Vin, restaurante con comida excepcional y bodega alucinante.
Animé allí una cata, y he de decir que me quedé más que impresionado con el sitio, el servicio, la bodega y la comida. Comí y cené allí, y en mi opinión, aguanta sin problema la comparación con grandes restaurantes europeos. Merece sin duda alguna, una o dos estrellas Michelín. Incluso pocas veces en mi vida he tenido la sensación de que todo el personal cuida todo y en su justa medida… Hasta el postre fue bestial!! Chapeau bas al cocinero, al joven pastelero y al joven sumiller.
Hicieron una cena maridaje impresionante, cerca de la perfección. Y he de confesar que siempre temo las comidas maridaje. Asi que repito, chapeau!! Bravo!! Felicitaciones!!
Y para un europeo la comida me pareció de una relación calidad precio increible, barato por lo que se come y se cobra.

Los vinos son un producto de lujo en México, las tasas de importación incrementan drásticamente el precio del vino. Pero la selección es impresionante. Grandes botellas del mudo entero: Francia, España, Italia, con una colección de los vinos de la Romaneé Conti, EEUU, Napa Valley, etc. Grandioso. Y se pueden encontrar botellas muy buenas a un precio aún razonable, pero sí más caro que en Europa.

El joven sumiller sabe ya mucho de vino, y me impactó con su selección y su manera genial de servir los vinos dulces.
Gracias a ellos por haber hecho un trabajo tan excelente y ayudar mis vinos a lucir, y tener un brillo muy favorable. También a los amantes del vino que asistieron a mi presentación, apasionados y muy atentos…¡Qué más se puede pedir!

Cata Club de Vinos:
Una de las catas más numerosas que he dirigido nunca, con más de 30 personas. Organizada por mi importador, Tierras de Uva, en su propia sede. Me gustó mucho la calidez de la gente, su interés en escuchar y aprender, que el vino no son matemáticas…Y por lo comentarios de algunos, más que acertados sobre algunos vinos españoles…Creo que ha sido la mejor cata que hice en mi vida.

Os animo a todos a descubrir este país, un país fabuloso y donde, aparte de algunas zonas conflictivas, no hay más problemas de seguridad que en una ciudad europea de tamaño comparable.
Sin embargo, hay tantos sitios como no los hay en Europa o ninguna otra parte del mundo, como los vestigios indígenas de antiguas civilizaciones…